De todas las veces que he ido a Japón, tres de ellas no he podido resistirme a lo impepinable que ver en Osaka. Y es que, la ciudad de las luces al más puro estilo japo, es una OnceInALifeTime en toda regla.
Sin ser yo friki… Japón está en mi top 3 (aquí te dejo la info) y encima, Osaka, siempre se lleva al menos un día de mi itinerario. Y por algo será…
Si quieres saber más o no tienes ni idea de qué hay, también te lo pongo fácil. Bienvenidos a un verdadero imprescindible de Japón: Osaaaaaaaaka.
Japón está en mi top de países favoritos
Qué ver en Osaka
Para poder responderte qué ver en Osaka, deberías primero preguntarte qué buscas de Japón y de cuánto tiempo dispones. Siempre he dicho que Osaka es única, pero para un ratito y verás por qué conforme leas esto.
Si dispones de muchos días, yo dedicaría 2 a Osaka, uno para la Osaka tradicional y otro para la Osaka súper luminosa. Si vas apretada de tiempo, dedica solo uno a la segunda parte y céntrate en Kioto para ver templos y barrios súper tradicionales.
Móntatelo como quieras, pero casi siempre tu itinerario por Japón pasa por Osaka, así que haz noche, porque Osaka de noche, es absolutamente única. Ah, y si haces noche, conozco un hotel cápsula súper chulo que te cuento más abajo.
Dotonbori
Aunque algunos le llaman el Times Square con canales, yo le encuentro mucho más parecido a Las Vegas, sustituyendo la avenida del Strip por el canal. Eso sí, muchos coincidimos en que Dotonbori es un impepinable de Osaka y yo te animo con fuerza a visitarlo tanto de día como de noche, porque ambas merecen la pena y el contraste es brutal.
El principal motivo es que de día vas a verlo todo más despacio y más en paz y la noche va a ser una locura y a ratos vas a querer huir corriendo. Lo ideal es relajarte haciendo cola en una de las tiendas de comida para probar alguna frikada nueva, como las famosas galletas enormes de queso…
Pero el verdadero icono de Dotonbori, con más de 30 metros de alto, es el Glico man, este corredor que lleva aquí desde 1935.
Aunque las cosas principales que hacer aquí son ver lucecitas y comer, también puedes acercarte al famoso Don Quijote, de solo 6 plantas, para comprar algo (como una crema para el dolor de cuello) o para subirte a su noria (que puedes ver desde fuera).
Muy importante es llegar cargada de paciencia y de hambre, porque deberías salir de aquí habiendo probado TODO lo que puedas de comer.
Sampuru
El sampuru es una de las cosas más japos que ver en Osaka. Sampuru en realidad viene del inglés sample (muestra), y es el arte de crear réplicas de comida súper apetecibles…
Osaka es, sin duda, uno de los mejores escaparates de sampuru de todo el país, con comida hiperrealista a gran escala a lo largo y ancho de las calles de Dotonbori. Es como un gran museo al aire libre de réplicas en resina.
Hozenji Yokocho
Y para pausar la locura y los neones de Dotonbori, hay un remanso de paz y calma que ver en Osaka, en pleno caos nocturno: el templo de Mizukake.
El mini templo está dividido en dos partes por la calle, a una los toris y farolillos y al otro la imagen de Amitabha Mizukake-fudo, que, a primera vista y sobre todo si es de noche, puede dar un yuyu del copón.
Pero mola, no huyas (más aún ahora que estás advertida) porque la estatua está cubierta por musgo porque se cree que vertiendo agua sobre ella, atraes prosperidad en los negocios y el amor. Se ve que la gente sigue creyendo porque está verde de narices.
Castillo de Osaka
Sin duda, de las cosas más famosas que ver en Osaka y, ojo, bien que merecido. Este precioso castillo fue el más grande de todo Japón durante años, pero cuando murió Hideyoshi, que fue quien ordenó construirlo, las tropas lo destruyeron.
Su gafe continuó, porque tras su reconstrucción, una tormenta eléctrica provocó un incendio que acabó con él de nuevo… En 1931 se vuelve a reconstruir, antes de la Segunda Guerra Mundial… pero, tranqui, que sobrevivió a los innumerables ataques aéreos.
Entrar solo cuesta unos 2€ (3€ si vas en temporada de cerezos), pero si te soy sincera, de todas mis visitas no he entrado ni una, lo rodeo entero y lo disfruto igual o más, porque interiormente no es gran cosa si has visitado algún castillo europeo previamente.
Y, perdóname que sea tan radical, pero por fuera, no hay belleza que iguale los castillos japoneses.
Shinsekai
Esta zona de la ciudad es de las más retros que ver en Osaka. Todas las calles de comercios y restaurantes son como Dotonbori pero con estilo ochentero… toa la nochentero…
Con la torre Tsutenkaku al fondo, las calles de Jan Jan Yokocho son el principal atractivo durante el día. Por la noche, el público suele ser más adulto y muy, muy gay. De hecho, Shinsekai es un muy famoso barrio gay de Osaka…
Por cierto, aquí verás el famoso Billiken (feo pa perros) que es en realidad americano y es considerado el «Dios de las cosas tal y como deberían ser» (The God of Things As They Ought to Be).
Este elfo con sonrisa de malote estaba en el desaparecido Luna Park del barrio, cuando el parque cerró, se conservó una réplica en la propia torre Shinsekai. De todos modos, hay miles de copias por todo el barrio con los pies desgastados, ya que dicen que si los frotas atraes la suerte…
Shitennoji
Y de toda la oferta de templos de la ciudad, este es mi favorito que ver en Osaka, porque, en realidad, si quieres hincharte a templos, los mejores están en Kioto…
Shitennoji es de los templos más grandes y antiguos de Osaka, fundado en el 593. Acceder al recinto budista es gratis, solo tienes que pagar unos euros si entras al templo y a los jardines. Para mí, solo llegar a esta zona ya es una maravilla.
Dónde dormir en Osaka
Tenía que hacerlo, además yo tengo mil defectos, pero la claustrofobia y la vergüenza no están entre ellos…
Después de 4 viajes a Japón, probé un hotel cápsula y me flipa, jajajaja, lo jurooooo quiero repetir en el 5º.
Lo primero que debes saber es que normalmente están separados entre chicos y chicas, y que son como colmenas con zonas comunes y taquillas individuales.
De este hotel cápsula (es el único que he probado y sobre el que puedo opinar) tengo que decir que las zonas comunes están más limpias que mi baño y que las mantienen yo juraría que cada hora, porque no es normal.
En el momento de más tránsito (a primera hora de la mañana) estábamos como 6 chicas pero todo estaba súper limpio.
Hay máquinas vending (como en todo Japón), vestuario, duchas y lavabos con amenities justo en el centro de la sala principal. Lo más curioso, también tienes tapones para los oídos… por si acaso, y te dan un pijama (por lo de ir decente en las zonas comunes). Yo me sentí en el juego del calamar 🙂
Dentro de la cápsula tienes enchufes a puntapala, luces, despertador… todo lo que tendrías en tu mesita de noche. A mí me costó dormir, pero por la emoción del sitio, porque lo que es descansar, se descansa del carajo…
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